Es un espaldero tradicional que asienta en un terreno de arenas y gravas calcáreas y por ello posee un nivel de producción bajo que nos permite obtener una cantidad acotada de botellas anualmente. Lo cosechamos a fines de marzo a mano y lo vinificamos interviniendo lo mínimo posible
Tras despalillar, fermentamos las uvas en pequeñas piletas de cemento de 30 Hl. a bajas temperaturas y con suaves pisones diarios. Sometemos los hollejos a maceraciones extendidas que llegan a los 35 días y trabajamos en parte con sombrero sumergido. Descubamos y realizamos crianza en las mismas piletas de cemento durante 12 meses, tras lo cual embotellamos sin afinar ni filtrar. Los vinos de esta añada resultaron muy finos y precisos, con gran potencial de guarda.
Total, de producción vendimia 2019: 7700 Botellas de 750cc.